Ética y buen gobierno

Ética y buen gobierno: los pilares de la democracia en el siglo XXI

El siglo XXI se caracteriza por un rápido avance tecnológico, transformaciones sociales y una creciente complejidad geopolítica. En este contexto, los principios de ética y buen gobierno no son solo ideales abstractos; son la estructura que sostiene las democracias funcionales y las sociedades resilientes. Este enfoque crítico fue el eje de la ceremonia de clausura institucional de la Capital Europea de la Democracia, donde un panel de expertos exploró cómo los marcos éticos y los modelos de gobernanza dan forma al presente y al futuro de los sistemas democráticos.

 

Ética: La Brújula Moral del Progreso

A menudo se considera que la ética es un ámbito abstracto reservado para filósofos y teóricos morales. Sin embargo, como destacó Begoña Román, presidenta del Comité de Ética de los Servicios Sociales de Cataluña, la ética es profundamente pragmática. “La ética no trata de una perfección abstracta, sino de crear las condiciones para vivir bien juntos”, afirmó. En un mundo donde las instituciones enfrentan con frecuencia la erosión de la confianza pública, la ética proporciona un marco para reconstruir las conexiones entre gobiernos, organizaciones y ciudadanía.

Román subrayó que la gobernanza ética no se trata de neutralidad o imparcialidad, sino de reconocer los valores y compromisos compartidos que unen a las sociedades. “A menudo confundimos imparcialidad con neutralidad”, comentó. “La verdadera imparcialidad implica el coraje de defender lo correcto, incluso cuando es incómodo”. Este enfoque destaca que la gobernanza ética no es pasiva; da forma activamente a las estructuras dentro de las cuales se toman decisiones, asegurando que se alineen con la justicia, la equidad y el bien común.

 

Buen Gobierno: Un Requisito para la Confianza

La democracia prospera gracias a la confianza. Sin embargo, como destacó David Velázquez, exjuez y experto en compliance, esta confianza es frágil y debe ganarse mediante una gobernanza transparente, responsable e inclusiva. “La integridad pública y privada no pueden existir en silos”, afirmó Velázquez. Señaló la evolución de los marcos de gobernanza de la Unión Europea, como las directivas sobre contratación pública y protección de denunciantes, que buscan estandarizar la transparencia y la equidad entre los estados miembros.

La necesidad de buen gobierno es aún más urgente en una era de interdependencia global. Velázquez enfatizó los desafíos de armonizar regulaciones a través de fronteras, subrayando que la gobernanza inconsistente crea vulnerabilidades que son explotadas por la corrupción y los actores de mala fe. Destacó la importancia de asociaciones público-privadas basadas en compromisos éticos: “La integridad no es opcional; es el fundamento de una cooperación sostenible”.

El buen gobierno también requiere que las instituciones sean adaptables. Como señaló Román: “Vivimos en una época de aceleración y volatilidad. Las instituciones deben ser estables, pero lo suficientemente flexibles para responder a cambios rápidos sin perder su orientación ética”. Este doble mandato—estabilidad y adaptabilidad—refleja las complejas demandas de la gobernanza en un mundo cada vez más moldeado por crisis como el cambio climático y la desigualdad social.

 

Implicaciones para Urbanistas y Arquitectos Sociales

Para los urbanistas y arquitectos sociales, los principios de ética y buen gobierno resuenan profundamente. Las ciudades no son meramente espacios físicos; son escenarios donde convergen poder, políticas y participación. Las decisiones sobre diseño y desarrollo urbano tienen profundas implicaciones para la democracia, la equidad y la inclusión.

En esencia, el urbanismo ético nos desafía a preguntarnos: ¿Para quién son las ciudades? ¿Qué voces se priorizan en los procesos de planificación y diseño? Las respuestas a estas preguntas revelan el tejido moral de nuestros entornos urbanos. El diseño inclusivo no es solo una elección técnica; es un imperativo democrático. Los espacios públicos, la vivienda, el transporte y la infraestructura verde deben diseñarse para reflejar y servir a comunidades diversas.

Por ejemplo, el diseño de viviendas públicas no debe limitarse a satisfacer la necesidad de refugio; también debe promover la dignidad y la cohesión social. Los parques y plazas públicas no solo deben ser estéticamente agradables, sino también accesibles y acogedores para los grupos marginados. Estas decisiones, aunque aparentemente mundanas, tienen efectos en cadena sobre cómo se vive la democracia en la vida cotidiana.

Además, como urbanistas, debemos lidiar con las dinámicas de poder que están integradas en nuestro trabajo. El desarrollo urbano a menudo intersecta con cuestiones de desplazamiento, gentrificación y justicia ambiental. El buen gobierno en el urbanismo requiere transparencia en la toma de decisiones, una participación comunitaria significativa y mecanismos de rendición de cuentas para prevenir daños.

 

Las Intersecciones de Ética, Gobernanza y Democracia

La intersección de ética y gobernanza es quizás más visible en cómo abordamos las desigualdades sistémicas. Como observó Román: “La verdadera prueba de la gobernanza es cómo sirve a quienes tienen menos poder”. Las democracias no se evalúan por cómo atienden a la mayoría, sino por cómo protegen los derechos y la dignidad de las minorías, los grupos marginados y las generaciones futuras.

Velázquez añadió otra dimensión a esta conversación, enfatizando el papel de los mecanismos de compliance en la implementación de una gobernanza ética. “La gobernanza no se trata solo de reglas; se trata de crear sistemas que permitan la rendición de cuentas”, afirmó. Señaló las protecciones a los denunciantes como un ejemplo de cómo la gobernanza puede empoderar a los individuos para desafiar la corrupción y las malas prácticas, fortaleciendo así las instituciones democráticas.

 

 

Una Llamada a la Acción

La ética y el buen gobierno no son ideales abstractos: son marcos accionables que influyen en todos los aspectos de la sociedad, desde la formulación de políticas hasta la planificación urbana. Para quienes damos forma al entorno construido, estos principios nos recuerdan que nuestro trabajo es profundamente político. Las decisiones que tomamos sobre el uso del suelo, la zonificación y la infraestructura son decisiones sobre quién tiene poder, quién tiene acceso y quién pertenece.

La ceremonia de clausura de la Capital Europea de la Democracia concluyó con una reflexión que encapsula este ethos: “La ética debe triunfar, porque es el fundamento del buen gobierno y la promesa de una sociedad justa”. En el siglo XXI, los desafíos que enfrentamos—crisis climáticas, fragmentación social y disrupción tecnológica—demandan no solo soluciones técnicas, sino también claridad moral.

Como arquitectos, urbanistas y ciudadanos, estamos llamados a contribuir a un proyecto compartido: construir comunidades donde la democracia no sea solo un sistema de gobernanza, sino una realidad vivida. Para lograrlo, debemos priorizar la ética y el buen gobierno, reconociendo que no son fines en sí mismos, sino medios para un futuro donde todos puedan prosperar.

Palabras de:

Konstantina Chrysostomou

Fecha de publicación:

15/11/2024

Escrito originalmente en:


inglés

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Vida cotidiana / Espacio público

Reflexiones por el Día Mundial del Urbanismo: La importancia de la planificación territorial en tiempos de crisis


Reflexiones por el Día Mundial del Urbanismo: la importancia de la planificación territorial en tiempos de crisis

Hoy, aprovechando que es el Día Mundial del Urbanismo y sumidos en la “resaca” que nos deja una tragedia como la que vive el País Valencià, queremos reivindicar la importancia de la planificación territorial en la gestión del mundo que nos rodea.

El Urbanismo no es solo una cuestión de distribución de espacios, sino también de prevención, adaptación y responsabilidad colectiva. Ante episodios como este, un urbanismo sostenible se vuelve fundamental para minimizar riesgos y proteger la vida y el bienestar de las personas. Cuando nuestro entorno está adaptado a la realidad del territorio, podemos afrontar estos fenómenos con más resiliencia.

Por otro lado, se hace evidente que el Urbanismo debe ser una tarea conjunta y que no puede realizarse únicamente desde un despacho. Es necesario que todos los agentes implicados (instituciones, entidades sociales, profesionales y ciudadanía) remen en la misma dirección, promoviendo una gestión del territorio que tenga en cuenta el cambio climático, la protección del paisaje y la preservación de los ecosistemas que actúan como barreras naturales. La construcción masiva, la impermeabilización sistemática del suelo o la falsa certeza de que podemos modificar y ajustar el entorno según las necesidades del momento no hacen más que agravar situaciones como esta.

Como sociedad, es momento de repensar cómo vivimos y cómo nos relacionamos con los espacios que habitamos, no solo para paliar los efectos de episodios meteorológicos como este, sino también para prevenirlos. En este Día Mundial del Urbanismo, reivindicamos un modelo territorial que respete el territorio, con la voluntad de escuchar el paisaje y adaptarnos tanto a sus necesidades como a las de las personas que lo habitan.

Palabras de:

Marc Deu Ferrer

Fecha de publicación:

08/11/2024

Escrito originalmente en:

catalán

Tags:

Vida cotidiana / Movilidad

sostenible / Biodiversidad /

Espacio público

Utopías, Distopías o “US-topías”: ¿En la Imaginación de Quién Estamos Viviendo?


Utopías, Distopías o “US-topías”: ¿En la Imaginación de Quién Estamos Viviendo?

En medio de un Smart City Expo totalmente centrado en la tecnología, la conferencia de Ruha Benjamin, titulada «Utopías, Distopías o Ustopías: ¿En la Imaginación de Quién Estamos Viviendo?», fue una joya poco común. Mientras gran parte de la exposición se enfocaba en soluciones tecnológicas de vanguardia para la vida urbana, Benjamin nos recordó que “inteligente” no solo aplica a la tecnología, sino también a la inteligencia comunitaria. Moderada por Femi Oke y con Benjamin, profesora de Estudios Afroamericanos en Princeton, como oradora principal, esta sesión aportó una perspectiva crítica al evento, invitándonos a ver más allá de las soluciones de alta tecnología y a reconocer el potencial de la sabiduría colectiva y la equidad social para dar forma a nuestro futuro urbano.

Benjamin inició su conferencia citando a la escritora feminista negra Toni Cade Bambara: “No toda velocidad es movimiento”, una llamada a reconsiderar el ritmo vertiginoso del cambio impulsado por la tecnología. Destacó que, aunque la innovación avanza rápidamente, las voces críticas y las comunidades vulnerables a menudo quedan relegadas. Al enfrentarnos a las crisis actuales, ya sea por violencia geopolítica, desigualdades socioeconómicas o políticas climáticas que agravan los fenómenos extremos, argumentó que los avances tecnológicos por sí solos no garantizan el progreso social. En cambio, la innovación debe cumplir con estándares más altos de equidad, justicia y transparencia.

Este enfoque crítico sentó las bases para una discusión matizada sobre dos narrativas predominantes respecto a la tecnología. Por un lado, está la visión tecno-distópica, que ve la tecnología como una amenaza que reduce la autonomía personal, desplaza empleos y elimina la libertad de las personas. Por otro lado, está el ideal tecno-utópico, que presenta la tecnología como la solución a todos los problemas sociales, haciendo nuestro mundo más eficiente e igualitario. Benjamin señaló un error común en ambas perspectivas: suelen ver la tecnología como una fuerza autónoma, desplazando a las personas, valores e intenciones que crean y controlan estos sistemas. En lugar de ver la tecnología como inevitable o predestinada, defendió que debemos “quitar la pantalla” para revelar a los agentes humanos y las dinámicas de poder detrás de ella.

Benjamin ilustró esta idea con el ejemplo del Proyecto de Innovación Comunitaria en Saint Paul, Minnesota, una colaboración impulsada por datos entre escuelas locales y fuerzas de seguridad para identificar a jóvenes “en riesgo”. A pesar del lenguaje aparentemente positivo de “innovación” y “comunidad”, las personas residentes expresaron su preocupación por el uso de datos y las intenciones de las instituciones involucradas, que sentían que históricamente habían fallado a la juventud local. Tras protestas organizadas, la comunidad logró detener el proyecto y abogó por reasignar los recursos directamente a las necesidades reales de los jóvenes sin la etiqueta estigmatizante de “en riesgo”. Aquí, Benjamin subrayó la necesidad de combinar crítica y creatividad: saber no solo qué rechazamos, sino también imaginar lo que queremos. Solo con esta doble perspectiva, argumentó, podemos desafiar el statu quo, que a menudo distorsiona nuestra visión del mundo y perpetúa la desigualdad.

Con una perspectiva global, Benjamin señaló cómo las jerarquías implícitas están integradas en diversas sociedades, desde las políticas “daltónicas” en Francia hasta la jerarquía racial en Brasil y las dinámicas de casta en la India. Estas desigualdades sistémicas a menudo se ocultan tras la promesa de neutralidad o incluso de benevolencia, pero afectan profundamente el acceso, las oportunidades y el poder. “¿Qué tipo de inteligencia está dando forma a nuestro futuro?” preguntó Benjamin, desafiándonos a cuestionar si es una inteligencia arraigada en la conciencia social y la equidad, o un enfoque jerárquico que cree falsamente que puede “resolver” los problemas estructurales solo a través de la tecnología.

Un ejemplo sutil pero poderoso que mencionó Benjamin fue la arquitectura hostil que a menudo se encuentra en los espacios públicos. Describió una visita a San Francisco donde vio bancos con barras divisorias diseñadas para impedir que las personas se tumben. Este diseño forma parte de una tendencia más amplia de espacios urbanos “exclusivos” que, bajo el pretexto de seguridad o funcionalidad, excluyen a ciertos grupos, especialmente a las personas sin hogar. Desde bancos con púas hasta asientos individuales, la arquitectura hostil ilustra cómo los espacios públicos se diseñan de forma sutil, pero deliberada, para dictar quién es bienvenido y quién no.

Benjamin también abordó la vigilancia estatal en las llamadas ciudades inteligentes, donde tecnologías como el reconocimiento facial y los drones se despliegan no solo para vigilar a migrantes, sino también para controlar a los residentes urbanos. Estas herramientas, argumentó, suelen reforzar las jerarquías raciales y sociales. Señaló casos recientes en Alemania donde la vigilancia en redes sociales se ha utilizado para negar derechos o revocar la ciudadanía de personas que apoyan movimientos de liberación, como el de Palestina. Estas prácticas de vigilancia, comercializadas como medidas de seguridad, a menudo reflejan prejuicios subyacentes y sirven para mantener estructuras de poder desiguales.

La conferencia culminó con el concepto de “ustopía”, un término acuñado por la autora Margaret Atwood que fusiona “utopía” y “distopía” para sugerir una realidad híbrida creada colectivamente. Benjamin propuso que, a diferencia de las utopías o distopías, que parecen “suceder” a nosotros, las ustopías son espacios que creamos activamente, imaginando realidades en las que se prioriza la inclusión y la justicia. Esta “gramática” de ustopía, argumentó, ofrece un marco poderoso para la resistencia y la transformación. Compartió la historia de un pueblo francés donde las personas residentes rechazaron bancos hostiles y abogaron por un espacio público inclusivo, un ejemplo de cómo las comunidades en todo el mundo ya están desafiando normas de exclusión y reimaginando sus entornos.

Para cerrar, Benjamin hizo un llamado a recuperar la imaginación colectiva como una herramienta de transformación social. Criticó la noción de “inteligencia artificial” como una solución única y, en cambio, instó a adoptar una mentalidad de “imaginación abundante”. Basándose en el conocimiento ancestral y la sabiduría comunitaria, imaginó un futuro en el que la tecnología no aísla, sino que empodera, armonizándose con las personas y el planeta en lugar de dominarlos.

En esta amplia exploración, Benjamin dejó al público con un potente desafío: repensar los sistemas que dan forma a nuestras vidas y asumir un papel activo en el diseño de una sociedad que valore la interdependencia y la equidad sobre la velocidad y la escala. Su llamada a la acción invita a cada uno de nosotros a ser co-creadores de un futuro más humano, inclusivo y justo.

Palabras de:

Konstantina Chrysostomou

Fecha de publicación:

08/11/2024

Escrito originalmente en:

inglés

Tags:

Vida cotidiana / Movilidad

sostenible / Biodiversidad /

Espacio público

Por qué la mitigación climática en las ciudades mediterráneas es más esencial que nunca


Por qué la mitigación climática en las ciudades mediterráneas es más esencial que nunca

La reciente tormenta DANA que azotó la región de Valencia ha sido un recordatorio de los crecientes riesgos climáticos a los que se enfrentan nuestras ciudades mediterráneas. Las graves inundaciones interrumpieron la vida cotidiana, dañaron viviendas y dejaron a comunidades enteras luchando por recuperarse. Lamentamos profundamente las dificultades que las personas han sufrido como consecuencia de estos fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más frecuentes en la cuenca mediterránea, una región especialmente vulnerable a los efectos del cambio climático, como sequías prolongadas, olas de calor intensas, aumento del nivel del mar e inundaciones repentinas. Esta realidad exige un cambio profundo en cómo planificamos, construimos y protegemos nuestros espacios urbanos.

Abordar el cambio climático en las ciudades mediterráneas requiere más que reforzar la infraestructura; exige una reimaginación de los espacios públicos como centros resilientes, adaptables e inclusivos para la vida comunitaria. Dada la alta exposición de la región a los riesgos ambientales, una mitigación climática efectiva demanda estrategias innovadoras como infraestructura verde, paisajes absorbentes y diseños resistentes al calor que proporcionen sombra y frescor en áreas densamente pobladas. Más allá de las mejoras físicas, la dimensión humana es igualmente vital: la cooperación y la participación ciudadana son fundamentales para crear áreas urbanas que realmente sirvan a todas las personas.

La verdadera resiliencia nace de la colaboración comunitaria, donde las voces locales desempeñan un papel activo en la configuración y el mantenimiento de sus entornos. Involucrar a las personas residentes en el desarrollo de estrategias urbanas fomenta un compromiso colectivo hacia los espacios compartidos y promueve el cuidado ambiental. A través de iniciativas como proyectos de reverdecimiento liderados por la comunidad, sistemas sostenibles de gestión de agua y el rediseño de espacios públicos priorizando la accesibilidad y la seguridad, las ciudades pueden adaptarse de maneras prácticas y profundamente alineadas con los valores y necesidades de la comunidad. Cuando estos esfuerzos se informan con pedagogía urbana—donde les ciudadanes aprenden sobre y participan activamente en el proceso de planificación urbana—el resultado son ciudades más sostenibles y resilientes, listas para enfrentar los desafíos futuros.

El clima único del Mediterráneo exige que consideremos las necesidades específicas de los diversos grupos dentro de nuestras ciudades. La planificación de resiliencia en esta región debe incluir diversas perspectivas, desde necesidades de género e interculturales hasta accesibilidad y requisitos de infancia. Los espacios públicos deben diseñarse no solo para soportar tensiones ambientales, sino para servir como puntos de encuentro donde todas las personas se sientan seguras, bienvenidas y conectadas con su comunidad. Integrando estas perspectivas, podemos crear un sentido de propiedad compartida que fomente la cohesión social, el bienestar mental y la salud física.

Además, al fortalecer los lazos sociales, los esfuerzos de resiliencia urbana inclusiva amplifican la capacidad de las ciudades mediterráneas para resistir y recuperarse de los impactos climáticos. Los enfoques basados en el lugar, impulsados por la comunidad, cultivan la confianza y un sentido de responsabilidad hacia los espacios públicos, empoderando a las personas residentes para actuar como guardianes de su entorno. Este enfoque holístico del diseño urbano significa que las ciudades pueden ofrecer espacios que son adaptables, receptivos y alineados con las necesidades de quienes más los utilizan. Cuando las estrategias urbanas incluyen voces diversas, las ciudades se vuelven más que resilientes; evolucionan hacia entornos que enriquecen la calidad de vida a través de la seguridad, la accesibilidad y la conexión.

Cada paso hacia una ciudad mediterránea más resiliente al clima es un paso hacia la preservación de nuestras comunidades para las generaciones futuras. Este trabajo no solo es ambientalmente responsable, sino vital para proteger la salud, la seguridad y la calidad de vida de nuestres vecines, familiares y residentes futuros. Las ciudades mediterráneas que priorizan a las personas, el lugar y el planeta por igual se convertirán en modelos de vida urbana sostenible, donde la adaptación al clima se encuentra con la inclusión social. Con cada iniciativa impulsada por la comunidad, construimos una base de resiliencia que permite a nuestras ciudades enfrentar los desafíos climáticos, al tiempo que fomenta un espíritu de unidad, pertenencia y propósito compartido.

Palabras de:

Konstantina Chrysostomou

Fecha de publicación:

31/10/2024

Escrito originalmente en:


inglés

Tags:

Vida cotidiana / Movilidad

sostenible / Biodiversidad /

Espacio público

Proteger la Democracia a través de la Democracia Participativa y los Movimientos Sociales

Proteger la Democracia a través de la Democracia Participativa y los Movimientos Sociales

La democracia a menudo se reduce al acto de votar: elegir representantes que hablen en nombre de la ciudadanía y esperar hasta el siguiente ciclo electoral para volver a hacer oír nuestras voces. Sin embargo, la democracia en su forma más auténtica debe ir mucho más allá de las urnas. Requiere la participación activa de la ciudadanía en los procesos de toma de decisiones y debe estar arraigada en las experiencias y luchas cotidianas de las personas. Los movimientos sociales, en particular, han jugado históricamente un papel vital en la expansión del proceso democrático y en asegurar que este siga vivo, dinámico e inclusivo.

Recientemente, tuve la oportunidad de asistir a la Bienal de Pensamiento en Barcelona, donde escuché debates muy interesantes sobre la importancia de proteger la democracia y el papel que la democracia participativa juega en este esfuerzo. Ponentes como Donatella Della Porta, Amador Fernández-Savater y Claudia Delso Carreira ofrecieron valiosas reflexiones sobre cómo podemos fortalecer los procesos democráticos fomentando una mayor implicación ciudadana y la acción colectiva. Sus reflexiones reforzaron la idea de que la democracia participativa no es solo un concepto teórico, sino una necesidad práctica frente a las crecientes amenazas a los sistemas democráticos en todo el mundo.

 

Los límites de la Democracia Representativa

La democracia representativa, aunque es un pilar esencial de la gobernanza moderna, a menudo es insuficiente para abordar las complejidades y desigualdades que existen dentro de la sociedad. Las elecciones pueden desconectarse fácilmente de las realidades de los grupos marginados—ya sea por razones de género, clase, raza u orientación sexual. Los movimientos sociales, por otro lado, llevan estas voces marginadas al centro de la atención. Como señaló una persona ponente, «Existen muchas dinámicas de poder que humillan ciertos cuerpos», destacando cómo la opresión sistémica se dirige a grupos particulares. Las estructuras democráticas tradicionales pueden pasar por alto estos problemas, pero los movimientos sociales crean espacios donde quienes han sido silenciados pueden ser escuchados.

La democracia participativa ofrece un marco para transformar estas frustraciones en acción. No se trata solo de votar cada pocos años, sino de involucrarse directamente con los temas que más importan a las personas. Se trata de diálogo, resolución colectiva de problemas y la formación de alianzas entre sectores diversos de la sociedad. Este proceso de «inventar una identidad y formar alianzas con personas diferentes a ti» refleja un compromiso democrático más profundo, uno que permite el desarrollo de una sociedad más inclusiva.

 

El papel de los movimientos sociales en la expansión de la democracia

Los movimientos sociales siempre han estado en el corazón de la transformación democrática. Desde los derechos laborales hasta el sufragio femenino, desde los derechos civiles hasta la justicia ambiental, los movimientos nacen de la necesidad de abordar las injusticias e impulsar el cambio. Estos movimientos hacen más que exigir reformas; desafían las estructuras mismas que perpetúan la desigualdad y ofrecen visiones alternativas de gobernanza y comunidad.

En los últimos años, movimientos como el Sindicato de Inquilinas y otras iniciativas de base en todo el mundo han demostrado el poder de la acción colectiva. Un ejemplo significativo proviene de Bolivia, donde un museo impulsado por la comunidad desafía las narrativas coloniales al involucrar a las comunidades indígenas como coautoras de las exhibiciones del museo. Este enfoque participativo rompe las dinámicas de poder tradicionales y transforma la forma en que se produce y comparte el conocimiento. Como observó una persona ponente, «Debemos aprender a escuchar con respeto, observar y cambiar las prácticas establecidas que perpetúan la dominación.»

Al ir más allá de los límites establecidos por la democracia representativa, los movimientos sociales nos recuerdan que la democracia no es estática. Debe ser trabajada y protegida constantemente. Estos movimientos tienen el potencial de reconfigurar los espacios públicos, crear instituciones más equitativas e involucrar a la ciudadanía de maneras significativas. Actúan como incubadoras vitales para la innovación democrática y someten al poder a control cuando las estructuras políticas tradicionales fallan.

 

La Democracia Participativa como Antídoto frente al Sistema Impulsado por el Mercado

Uno de los principales desafíos que enfrenta la democracia hoy en día es la creciente influencia de las fuerzas neoliberales de mercado que priorizan el beneficio sobre las personas. El dominio del sistema de mercado se ha infiltrado en todos los aspectos de la vida, incluidas las instituciones democráticas, convirtiendo a la ciudadanía en consumidora en lugar de participantes activas. En respuesta, los movimientos sociales y la democracia participativa ofrecen una vía para recuperar el espacio público del control de la lógica de mercado.

Como señaló otra persona comentarista, vivimos en un momento en que «la vida de mercado fomenta el comportamiento egoísta», pero nuestra misma naturaleza como seres humanos se basa en la cooperación. La democracia participativa, cuando se practica plenamente, reúne a las personas en un espacio compartido donde la cooperación, y no la competencia, se convierte en el principio rector.

En este sentido, la democracia no es solo una herramienta de gobernanza, sino un espacio para construir comunidad y solidaridad. Proporciona una alternativa a la noción neoliberal de individualismo, poniendo el acento en el bienestar colectivo. La idea de que «nuestras células están diseñadas para cooperar» desafía la creencia de que la democracia debe estructurarse en torno a la competencia y las luchas por el poder. La democracia participativa exige inclusividad, deliberación y responsabilidad compartida por el bien común.

 

Proteger la Democracia ante las Políticas Reactivas

El aumento de los movimientos de extrema derecha y de líderes populistas en todo el mundo representa una amenaza significativa para la democracia. Estas fuerzas reactivas a menudo apelan a los miedos de las personas, manipulándolas con desinformación y xenofobia. Sin embargo, los movimientos sociales pueden actuar como una fuerza contraria al promover un diálogo informado y empático. El crecimiento de movimientos que desafían el dominio corporativo en la educación, la salud y la vivienda demuestra que la ciudadanía no está dispuesta a aceptar pasivamente estas amenazas a su bienestar.

Pero para que estos movimientos sean efectivos, deben ir más allá de la mera crítica al sistema. La crítica es importante, pero como señala una persona académica, «La crítica es una manera de no querer que nada cambie.» En lugar de limitarse a señalar lo que no funciona, los movimientos deben centrarse en construir algo mejor, creando espacios donde las personas puedan imaginar y construir nuevos futuros.

Es crucial que los movimientos sociales continúen ampliando el significado de la democracia más allá de sus limitaciones institucionales. La democracia no debe limitarse a votar cada pocos años o a las decisiones de unas pocas personas electas. La verdadera democracia requiere un compromiso continuo y la protección de espacios donde la ciudadanía pueda colaborar, desafiar el poder y trabajar por el bien común.

 

El Futuro de la Democracia: Construir un Proyecto Colectivo

Los desafíos que enfrenta la democracia hoy en día son inmensos, pero también lo son las oportunidades. A medida que los movimientos sociales de todo el mundo continúan movilizándose, están demostrando que la democracia puede ser más que un conjunto de procedimientos o instituciones, puede ser un proceso vibrante y participativo arraigado en la vida cotidiana de la ciudadanía.

Aprovechando las lecciones de los movimientos pasados y presentes, debemos seguir ampliando el alcance de la democracia, asegurándonos de que se vuelva más inclusiva, equitativa y receptiva a las necesidades de todas las personas. Como dijo una persona ponente, «La transformación no es solo sobre el contenido, sino sobre las maneras de hacer las cosas.» Debemos repensar cómo practicamos la democracia, y esto comienza por adoptar métodos participativos que empoderen a la ciudadanía para asumir un papel activo en la configuración del mundo que les rodea.

En conclusión, proteger la democracia requiere mucho más que salvaguardar elecciones o instituciones políticas, exige fomentar una cultura de participación, donde voces diversas puedan reunirse, compartir sus historias y construir nuevas formas de solidaridad. Los movimientos sociales seguirán siendo el motor de esta transformación, y a través de ellos, podemos construir una democracia que realmente funcione para todas las personas.

Citas:

  • «La cooperación no es solo una herramienta de resistencia, sino una parte fundamental de nuestra naturaleza humana; así es como hemos superado la adversidad a lo largo del tiempo.»
  • «La transformación no es solo sobre el contenido, sino sobre las maneras de hacer las cosas.»
  • «Debemos aprender a escuchar con respeto, observar y cambiar las prácticas establecidas que perpetúan la dominación.»
  • «La crítica es una manera de no querer que nada cambie. El verdadero desafío es construir espacios donde podamos imaginar y crear futuros mejores.»
  • «La vida de mercado fomenta el egoísmo, pero nuestra naturaleza humana está diseñada para la cooperación.»

En un mundo donde la democracia enfrenta amenazas constantes, los movimientos sociales y la democracia participativa siguen siendo vitales para mantenerla viva y significativa.

Palabras de:

Konstantina Chrysostomou

Fecha de publicación:

14/10/2024

Escrito originalmente en:

inglés

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Vida cotidiana / Espacio público

Cals Frares, Casa de Entidades

Cals Frares, Casa de Entidades

El Ayuntamiento de Tiana promovió el proceso participativo por la transformación de los nuevos locales en un nuevo equipamiento de asociacionismo, co-diseñado con las entidades municipales y el equipo técnico y político. Así que en los últimos meses, hemos estado trabajando con las entidades de Tiana, el equipo técnico y el equipo político del municipio, la propuesta.

La Casa de Entidades Cals Frares, es un equipamiento municipal destinado al uso de las asociaciones y entidades sin ánimo de lucro de Tiana, ofreciendo un modelo de creación de ecosistema cívico. Este equipamiento facilita:

  • el trabajo asociativo, ofreciendo diversos espacios para su desarrollo,
  • la colaboración en el crecimiento y mejora del movimiento asociativo
  • la posibilidad de relación interasociativa entre las distintas entidades.

La Casa de Entidades, provee espacios de trabajo y oportunidades para las entidades y colectivos, participar en actividades socioculturales, aprender, explorar y crear. Facilita situaciones para que las personas se reúnan y se conozcan. Este sitio acoge una amplia variedad de programas y actividades culturales, artísticas y educativas con el objetivo de fomentar la creatividad, y la confianza comunitaria.

​La fundación y el funcionamiento de la Casa de Entidades se basa en un enfoque cooperativo, desde su creación hasta su funcionamiento. Este sitio sirve como herramienta para este modelo de cooperación, ya que las y los miembros de las entidades y colectivos son la parte más activa de la sociedad, aglutinando a personas de todas las edades, profesiones y nacionalidades. El papel del asociacionismo en el desarrollo de la sociedad civil está creciendo junto con el apoyo del municipio a proyectos y actividades conjuntas.

Con la transformación de la Casa de Entidades en un generador de vida social por el municipio de Tiana se puede conseguir:

  • Reforzar la identidad local.
  • Generar un punto de encuentro social y cultural intergeneracional de la población que no excluya a nadie.
  • Democratizar el acceso a los recursos municipales y mejorar la calidad de vida para todos.
  • Fomentar la implicación de la comunidad y permitir que la comunidad actúe en su municipio mediante la Casa de Entidades, sus recursos para iniciar nuevas actividades y servicios.
  • Crear un tercer lugar que desempeña un papel muy importante en la vida pública del municipio.
  • Promover colaboraciones e intercambio de conocimiento entre entidades y colectivos.

A partir de un análisis elaborado sobre el contexto territorial, administrativo y social en el que se encuentran los nuevos locales, a través de un proceso participativo con el equipo técnico y político y las entidades, asociaciones y colectivos del municipio, hemos podido definir los siguientes:

  • la identidad del sitio,
  • el programa de usos,
  • la propuesta de distribución,
  • los criterios de intervención arquitectónica,
  • los criterios para la incorporación de la perspectiva de género,
  • la propuesta de gestión y la gestión del “mientrastant”.

Lugar

Tiana

[9,009 habitantes]

Escala

Municipal

Tipo de proyecto

Estrategias urbanas

Cooperación ciudadana

Duración

5 meses [2022]

Impulsoras

Ayuntamiento de Tiana

 

Equip redactor

*estel (Konstantina

Chrysostomou,Roser Garcia

Piqué, Arnau Boix i Pla, Alba

Domínguez Ferrer, Marc Deu i

Ferrer)

 

Han colaborado

Entitats i associacions de

Tiana

Presentación

Ver la presentación en el prezi

Proceso de participación para ampliar el inventario del patrimonio cultural de Terrassa

Proceso de participación para ampliar el inventario del patrimonio cultural de Terrassa

El Proceso Participativo asociado al Avance de la Modificación puntual del POUM para ampliar el inventario de bienes de Patrimonio Cultural de Terrassa, se ha realizado entre los meses de septiembre de 2021 y enero de 2022. Para poner en valor el patrimonio de la ciudad, elaborando una propuesta de regulación que cuente con el conocimiento ciudadano se ha abierto este espacio de participación en una fase inicial de la tramitación urbanística.

Terrassa es una ciudad con un remarcable valor patrimonial. Cabe destacar de los episodios históricos, el conjunto monumental de la Seu d’Ègara, fundado a mediados del siglo V con las iglesias románicas de San Pedro y Santa María y los retablos góticos del siglo XV; el Castillo Cartuja de Vallparadís, originario del siglo XII, convertida en cartuja en los siglos XIV-XV y el claustro del Convento de San Francisco del siglo XVII. Con la revolución industrial catalana, Terrassa se convirtió en un centro primordial del sector textil de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Fábricas, almacenes, así como edificaciones residenciales se concentran en la ciudad durante el período del Modernismo, con ejemplos tan remarcables como la Masía Freixa y la Casa Alegre de Sagrera.

Para la ciudadanía tarrasense, los elementos patrimoniales se convierten en elementos identitarios. Es una ciudadanía activa y preocupada por conservar y preservar estos bienes que son los vestigios del pasado común y se traducen en orgullo ciudadano. El vínculo se fundamenta con asociaciones de vecinos y vecinas interesados ​​en el patrimonio, que cuentan con el apoyo y asesoramiento de entidades, como la Mesa de Patrimonio y el Centro de Estudios Históricos de Terrassa.

Por parte del Ayuntamiento de Terrassa se les da voz para que puedan expresar sus opiniones y valoraciones en la ampliación del inventario de bienes de Patrimoni Cultural de Terrassa. En definitiva, una revisión y reflexión grupal para seguir custodiando el patrimonio con las mejores condiciones posibles en un correlativo legado de pasado a futuro.

Los objetivos a partir de los cuales se plantea el proceso participativo son:

  • Facilitar la divulgación y comprensión del documento de avance de la MPOUM, así como de los antecedentes vinculados a la regulación del Patrimonio Cultural de Terrassa.
  • Conseguir un plan/proyecto de mayor calidad: Recoger diferentes perspectivas y propuestas sobre los elementos a regular y los criterios a tener en cuenta.
  • Tejer nuevas relaciones y mejorar la gobernanza con los agentes afectados del territorio, para facilitar su gestión y seguimiento durante el propio proceso participativo, así como también en las siguientes etapas de la tramitación urbanística.

Lugar

Terrassa 

[218,535 habitantes]

Escala

Municipal

Tipo de proyecto

Estrategias urbanas

Cooperación ciudadana

Duración

8 meses [2021-2022]

Impulsoras

Ayuntamiento de Terrassa

 

Equipo redactor

*estel (Marc Deu i Ferrer,

Konstantina Chrysostomou,

Arnau Boix i Pla, Alba

Dominguez Ferrer),

Fàtima López Pérez,

Pablo Tardio

 

Han colaborado

Vecindario de Terrassa

Prensa

Leer más sobre el proyecto en

el participa.terrassa

Caminos Escolares de las escuelas Marianao i Montbaig


Caminos Escolares de las escuelas Marianao i Montbaig

Siguiendo la estela de la “Guía táctica de los Caminos Escolares de Sant Boi de Llobregat” que trabajamos en 2020, se han redactado los proyectos de Camino Escolar de las escuelas Montbaig y Mariano. El objetivo es el de mejorar las dinámicas de movilidad y la calidad del espacio público del entorno de las escuelas y al mismo tiempo poner en práctica las metodologías descritas en la guía, y que deben servir de base para el resto de centros del municipio.

Los proyectos se inicia con el análisis de los recorridos diarios del alumnado, que se obtienen a través de una encuesta individualizada. A continuación se hace una auditoría de las calles y plazas del entorno, atendiendo a aspectos que van desde la accesibilidad y conectividad, el confort o la capacidad que tiene el espacio público para favorecer la autonomía y el desarrollo de niños y niñas en condiciones de seguridad. Todo este análisis, se acompaña de acciones participativas y pedagógicas con el alumnado, los equipos docentes y las familias, con el objetivo de recoger sus percepciones e incidir de forma directa en sus hábitos de movilidad.

Con todo, el documento acaba definiendo acciones específicas que se agrupan bajo tres ejes temáticos: actuaciones físicas sobre el espacio público, acciones pedagógicas y participativas y acciones comunicativas.

Lugar

Sant Boi de Llobregat 

[82.904 habitantes]

Escala

Espacio publico

Tipo de proyecto

Estrategias urbanas

Cooperación ciudadana

Diseño de espacio público

Duración

6 meses [2022]

Impulsoras

Ayuntamiento de Sant Boi de

Llobregat

 

Equipo redactor

*estel (Marc Deu Ferrer,

Arnau Boix i Pla, Konstantina

Chrysostomou, Alba

Domínguez Ferrer)

Pau Avellaneda

 

Han colaborado

Comunidad educativa

vinculada a las escuelas

Marianao y Montbaig

Exposición sobre espacios activos e inclusivos


Exposición sobre espacios activos e inclusivos

En el marco del proyecto dirigido por monoDestudio, asesoramos y acompañamos su trabajo dando apoyo al diseño y producción de una exposición museística en el Centro Cultural Las Cigarreras (Alacant), a partir de  la documentación generada en encuentros participativos sucesivos con el foco en la diversidad funcional y la activación post pandémica del espacio urbano y la cultura.

Dicha exposición recoge las reflexiones y experiencias de las personas participantes, pertenecientes a colectivos vinculados a la diversidad funcional y sensorial, y se organiza en una pequeña sala de Las Cigarreras, con criterios de accesibilidad al espacio y a la información. La idea principal es exponer allí el diálogo crítico generado, comunicando las problemáticas que interesan a estos colectivos de manera visual y gráfica al resto de visitantes. El proceso de reflexión crítica y trabajo por lo tanto es el generador de nuevos contenidos culturales que, además de empoderar a los colectivos implicados, posibilita un retorno social de su propia producción cultural.

Sumamos pues a monoDestudio nuestra experiencia en proyectos relacionados con la diversidad funcional y los entornos urbanos, así como la accesibilidad en la comunicación, para diseñar y producir la expresión de los contenidos de la exposición “MvMet: Una reflexión sobre espacios públicos más activos y accesibles”. Rotulación contrastada, elementos táctiles, pictogramas de fácil comprensión, información ajustada a la distancia de lectura y una organización de contenidos que facilita el seguimiento del relato global, todo preparado para que la experiencia museística pudiera ser disfrutada por cualquier visitante, con independencia de su diversidad funcional y sensorial.

Ubicación

Alacant 

[331.577 habitantes]

Escala

Municipal

Tipo de proyecto

Cooperación ciudadana

Pedagogía urbana

Duración

4 meses [2022]

Impulsoras

Consorci de Museus de la

Comunitat Valenciana

 

Equipo redactor

monoDestudio

*estel (Arnau Boix i Pla,

Konstantina Chrysostomou,

Marc Deu Ferrer, Alba

Domínguez Ferrer)

 

Han colaborado

Centro San Rafael, APSA,

FESORD, COCEMFE, ONCE y

AEBHA.

Presentación

Ver web del equipo director en

monoDestudio.es

 

Prensa

Consultar el proyecto en la

web del Consorci de Museus de la

Comunitat Valenciana

Proceso participativo vinculado al Plan Director Urbanístico del Biopol Granvia


Proceso participativo vinculado al Plan Director Urbanístico del Biopol Granvia

El ámbito del PDU Biopol Gran Via es una gran área no edificada que limita con la Gran Via, el barrio de Bellvitge y el parque fluvial del río Llobregat. Se trata de un espacio de gran valor ambiental, ya que acoge todavía usos agrícolas y ejerce de conector entre la trama urbana y el entorno natural. Asimismo, supone una gran oportunidad de ampliación de los equipamientos sanitarios actuales, por su ubicación y la proximidad de la Granvia. 

En el marco de la redacción de un Plan Director Urbanístico (PDU) que defina cómo ordenar el territorio, se ha desarrollado este proceso participativo, con el objetivo de que la normativa urbanística tenga un vínculo con la realidad del territorio, especialmente a nivel social. Es ineludible que la transformación de este entorno se planifique y proyecte de forma coherente con las necesidades de las personas que lo utilizan tanto de forma diaria (residentes, agricultores, trabajadores…) como de manera esporádica. 

Por todo ello, ha sido un proceso intenso y complejo, que ha necesitado diversidad de espacios y canales de debate, para que todo el mundo tuviera la oportunidad de compartir sus propuestas con el resto de agentes implicados y, poco a poco, ir construyendo un relato compartido. La información recogida se ha trabajado en paralelo con el equipo redactor para buscar y definir los criterios que hagan que la participación tenga impacto en la futura normativa, y en definitiva, que enriquezca el resultado final. 

Cabe decir que el proyecto se ha realizado conjuntamente con las compañeras de Equal Saree y con la colaboración puntual de Islote Studio.

Ubicación

Hospitalet de Llobregat

[264.657 habitantes]

Escala

Supramunicipal

Tipo de proyecto

Cooperación ciudadana

Duración

9 meses [2022]

Impulsoras

Consorci per a la reforma de la

Granvia a l’Hospitalet,

Ajuntament de l’Hospitalet de

Llobregat, Generalitat de

Catalunya

 

Equipo redactor

*estel (Marc Deu Ferrer,

Konstantina Chrysostomou,

Alba Domínguez Ferrer, 

Arnau Boix i Pla)

 

Equal Saree

Islote Studio

 

Han colaborado

Vecindario del Hospitalet de

Llobregat